domingo, 23 de marzo de 2014

El derbi se queda en Mestalla.

El Valencia ha salido a morder desde el primer minuto. El Valencia que se ha mostrado mucho más intenso que el Villarreal desde el principio, con constantes aproximaciones a la meta de Asenjo, cuyo equipo apenas reaccionaba ante los acercamientos al área de los chés.


Este ritmo se rompió en el momento de la lesión del portero valencianista, Diego Alves (m.20). El meta brasileño tuvo que abandonar el terreno de juego y dejar su puesto a Vicente Guaita, que entró en la convocatoria a última hora. Oportunidad inmejorable para reivindicarse.

Los goles del Valencia llegaron por medio del centrocampista, Javi Fuego, que  se estrenó como goleador  en los minutos 35 y 44, la primer al recoger un rechace desde el borde del área y la segunda en boca de gol tras un balón que Mathieu envió al poste. 

El descanso llegaba con el Valencia a pleno rendimiento y con el Villarreal maniatado por el juego de su rival y obligado, para no perder, a ofrecer una versión muy diferente en la segunda parte.

La segunda parte comenzó con un nuevo cambio, también por lesión. Víctor Ruiz se quedaba en los vestuarios, dejando su lugar al joven Vezo. Aunque el Villarreal no adueñó de la situación, el empuje valencianista fue menor, se jugó más cerca del área de Guaita y Oliver Torres dispuso de la primera ocasión para el equipo visitante en un disparo que salió fuera en el minuto 56. Mediada la segunda mitad, las fuerzas se equilibraron en el juego, pero el Valencia, al jugar más adelantado el Villarreal, encontraba espacios para la contra y, cuando no tenía el balón, sabía como frenar a su rival. 

Pero, en una acción aislada, un fallo defensivo del Valencia propició el 2-1, marcado por Gio en un remate de calidad que premiaba la mejoría visitante tras el descanso y, sobre todo, daba emoción al partido en su tramo final. Sólo quedaban 10 minutos y resultó insuficiente para llevarse un premio inmerecido de casa del vecino. Pizzi le ganó el pulso a Marcelino, tanto de maña como de fuerza y eso llenará de moral a los blanquinegros para el tramo final de Liga.

Si es que al Valencia le gusta sufrir hasta el final, pero el derbi se queda en Mestalla. Revancha conseguida, después de perder por goleada en el Madrigal en la primera vuelta. 


Sólo me queda decir una cosa:


Amunt València C.F.! 

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